martes, 18 de diciembre de 2007

Monstruo sagrado

Pocas veces se tiene la oportunidad de acercarse -no de ver, a lo lejos, como si la vida también fuese una pantalla de cine- a personas como Alejandro Jodorowsky. Sí, de acercarse y cruzar dos o tres frases hechas que desembocan en las cosas más divertidas y alucinantes. Eso: alucinantes. Este tipo es un alucinado, un iluminado y un artista como pocos. Como ninguno, bah. Me lo dicen sus pelis más logradas, como El topo, Fando y Lis, La montaña sagrada, y todo muy a pesar de Tusk y otras farradas. Hay también libros, muchos libros, pero se le prefiere en el cine o hablando, hablando de todo y de lo que importa. Ahora le da mucho por la psicomagia y la búsqueda de sentido en el tarot. Me parece que, para los demás, eso ya no importa mucho -como no sea verlo dirigiendo una sesión de hipnosis, totalmente loco y latinoamericano-. ¿Totalmente loco, digo? Más cuerdo, mucho más, que cualquiera de nosotros...

1 comentario:

help[1].txt dijo...

Como dejar fuera santa sangre? Lo recuerdo enemy una feria del libro en mty. Excelente persona.